Por Manolo Pasero
En un logro económico notable, Baja California se ha convertido en el estado con el mayor crecimiento económico en el norte de México, atrayendo más de $5,3 mil millones de dólares en Inversión Extranjera Directa (IED) durante los primeros tres años de la administración de la gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda. Las políticas económicas dinámicas del estado, que enfatizan el crecimiento sostenible, lo han colocado a la vanguardia del desarrollo industrial de México, posicionándolo como un actor clave en la economía global.
Un aumento récord de la inversión
El sólido desempeño económico de Baja California es evidente en las impresionantes cifras de IED, que alcanzaron los $502.3 millones solo durante el segundo trimestre de 2024. Esto elevó el total para el primer semestre del año a unos sustanciales $1,81 mil millones, lo que representa el 5.8% de la IED nacional de México durante el período, según datos de la Secretaría de Economía.
La gobernadora Ávila Olmeda, en su reciente tercer informe de gobierno, subrayó que estas inversiones no solo son indicativas de crecimiento económico, sino también un reflejo del enfoque de su administración en el desarrollo sustentable y el bienestar inclusivo. Bajo su liderazgo, el estado ha elaborado políticas diseñadas para fomentar tanto el dinamismo económico como la prosperidad social, asegurando que los beneficios del crecimiento se distribuyan ampliamente.
Los principales impulsores de la inversión: la manufactura en el sector del transporte
Uno de los contribuyentes más importantes a este aumento de la IED ha sido el sector de la manufactura en el sector del transporte, que por sí solo representó casi el 63% de las inversiones extranjeras totales durante el primer semestre de 2024. Baja California, con su ubicación estratégica a lo largo de la frontera entre Estados Unidos y México, ha sido durante mucho tiempo un centro de operaciones de fabricación y ensamblaje, particularmente en las industrias automotriz y aeroespacial. Este sector continúa prosperando, respaldado por la sólida infraestructura del estado, la fuerza laboral calificada y la proximidad a los principales mercados internacionales.
El crecimiento de la manufactura en el sector del transporte no solo ha atraído a inversionistas internacionales, sino que también ha impulsado el desarrollo de industrias relacionadas, como la logística, la electrónica y los materiales avanzados. Como resultado, Baja California está experimentando un efecto dominó de la actividad económica, fortaleciendo aún más su posición como potencia industrial.
Interés global: una mezcla diversa de inversionistas
El atractivo del estado para los inversionistas extranjeros se refleja en la amplia diversidad geográfica de las naciones que invierten en Baja California. En total, empresas de 27 países diferentes han realizado inversiones en la región. Entre ellos, Estados Unidos se destaca como el mayor inversor, contribuyendo con el 45,7% de la IED total. Japón le sigue de cerca con el 42,4%, mientras que España representa el 8,2%. Este respaldo internacional es un testimonio de la importancia estratégica de Baja California y su reputación como un destino de inversión estable y atractivo.
Se espera que estas inversiones extranjeras sigan impulsando la transformación económica de la región. Al atraer capital de economías industriales establecidas como Estados Unidos y Japón, Baja California está reforzando su papel como actor fundamental en la cadena de suministro global, particularmente en sectores donde la innovación y la tecnología son clave.
Baja California: un modelo para el crecimiento económico del norte de México
Gracias a su impresionante desempeño económico, Baja California ahora lidera el grupo en términos de crecimiento económico entre los estados del norte de México. El estado ha superado a potencias industriales tradicionales como Nuevo León y Chihuahua, que durante mucho tiempo han sido fuerzas dominantes en el sector manufacturero de la región. La capacidad de Baja California para atraer una cantidad tan significativa de IED en un período relativamente corto resalta su creciente competitividad y su potencial para convertirse en un actor aún más influyente en el panorama industrial y económico de México.
La administración del gobernador Ávila Olmeda ha priorizado políticas que apoyan el crecimiento sostenible al tiempo que garantizan que el progreso económico sea compartido por todos los segmentos de la sociedad. Este equilibrio de crecimiento y bienestar se refleja en los crecientes indicadores económicos del estado y ha posicionado a Baja California como líder no solo en el norte de México sino en todo el país.
El futuro: mantener el impulso
Con su trayectoria actual, Baja California está preparada para mantener su posición como líder en crecimiento económico en los próximos años. El enfoque en la innovación, el desarrollo sustentable y el fomento de la inversión extranjera probablemente seguirán impulsando la prosperidad del estado. Además, la creciente presencia de empresas internacionales y la expansión de las capacidades de fabricación sugieren que la influencia económica de Baja California solo se fortalecerá a medida que continúe aprovechando las oportunidades globales.
A medida que la gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda entra en la segunda mitad de su mandato, los resultados de las políticas económicas de su gobierno dicen mucho sobre el potencial de Baja California para seguir siendo un motor vital de crecimiento en el norte de México. Al seguir atrayendo una inversión extranjera significativa, el estado no solo está asegurando su propio futuro económico, sino que también contribuye a la prosperidad general de la región y del país.
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